Por tu Santa Cruz redimistes el Mundo

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domingo, 22 de mayo de 2011

NUNCA NOS HEMOS IDO

Resulta cuanto mas paradójico, que algunos en un interesado ejerció de Alzheimer borra del disco duro aquello que le incomoda de ver, en ese sentido se elimina la historia, los datos, los momentos y a las propias personas que es lo peor. Para el que piense de esta manera les mandamos a titulo de pastilla este articulo, un fosgluten que no nos deja en el cero de la nulidad del limbo del olvido, pues por mucho que esto fastidie nunca nos hemos ido, hacemos los que venimos haciendo desde pequeños, desde siempre, tal como nos enseñaron  nuestros mayores. Así nos verán en los cultos, en los besapies mensuales o cumpliendo con nuestro deber de vestir el habito tras un discreto velillo anónimo, muy próximos a nuestro Cristo, porque su cercanía a los que nos sentimos nazarenos resulta una necesidad, que ahora nos toca transmitir a nuestros hijos, de manera que siendo fieles a nuestro propio ser NUNCA NOS IREMOS.

Si sentís algo parecido de lo que aquí plasmo, me interesaría saber vuestra experiencia invitando a que comentéis en el blog y nos mandéis vuestras fotos.

 1984
 2008

2010


2011












lunes, 2 de mayo de 2011

Ya nuestra Casa Hermandad no es virtual.

En pocos días abriremos las puertas de nuestra casa, “La Domus Nazarena” un punto mas de inflexión en el suma y sigue necesario para nuestro objetivo. Este será sin duda nuestro lugar de encuentro, porque ya estamos cansados de vernos por Internet. Vamos en serio, esto va marchando y tiene fuerza, ya huele a guiso del Juli mas las cositas del Antoñito. Esto no sería posible sin el trabajo desinteresado del rey de los voltios (Carlos “El Guapo”), el Miguel Angel de brocha gorda (Isra) , el Sr. Chani el novio de la muerte y los clavos de Javi, y GRACIAS. ¡Ojo la mudanza la hacemos todos los que me faltan por nombrar!

Estrenamos una Inmaculada Concepción pintada por Fernández Villegas, policromada al óleo y estofada con oro, el portento de nuestro amigo nos ha dejado una imagen delicada que da fe de su advocación tan enraizada en nuestro hondo sentido de la fe, pues todos le hicimos “el voto” y no podía ser de otra manera que presidiera este nuestro rincón.











Este Crucificado también decorará una de las paredes de nuestro cuarto.